Prótesis Dentales

Prótesis fija

Consiste en la reducción del diente en unas proporciones determinadas y en todas las caras que el diente presenta a la boca. Con ello se consigue espacio suficiente para cementar de una manera fija una corona o “funda”, que restaurará o mejorará el contorno ideal de dicho diente. Este tratamiento se denomina puente cuando se reducen los dientes que hay a ambos extremos de un espacio sin diente. Ello tiene el objetivo de cementar una estructura rígida de 3 o más piezas que repondrá no solo el esmalte de los dientes (llamados pilares) sino también el o los dientes ausentes.

Hoy día existen materiales suficientemente estéticos en el mercado (zirconio, cerámicas de alta resistencia,..) como para evitar que se vean las líneas oscuras al lado de la encía que anteriormente referían los pacientes. Llevamos trabajando con ellos más de 20 años y los resultados que hemos obtenido son excelentes tanto a nivel de estética como de resistencia.

¿Qué es mejor un implante o un puente?

En la mayoría de los casos es más aconsejable colocarse un implante que preparar 2 dientes para cementar un puente. Sin embargo, y debido a que para colocar un implante es necesario que exista suficiente cantidad de hueso en la zona, a veces (por fortuna es cada día menos frecuente) la mejor opción para cubrir un espacio sin diente es un puente.

Prótesis removible

Tanto prótesis parciales (con refuerzo metálico, llamadas esqueléticos, o enteramente de resina) como prótesis completas (para pacientes que no tienen ningún diente) siguen realizándose, aunque la incorporación de los implantes a la práctica diaria de las consultas ha hecho que sean cada vez menos frecuentes.